lunes, 20 de junio de 2011

Vía Ácrata

Vía Ácrata
Carta de presentación
Punto de partida
Con frecuencia como seres humanos delegamos en otros nuestro poder y nuestras más altas esperanzas para construir una sociedad en la que podamos vivir bien, en paz y armonía, con nuestros congéneres y con la naturaleza toda. En el fondo, nadie puede representar a nadie que no sea él mismo; cada quién sólo puede hablar por sí mismo.
La experiencia generalizada es que estos “representantes”, usualmente farsantes“metidos” a políticos, casi nunca cumplen con tal propósito. En realidad son verdaderos usurpadores de las voluntades de las personas. Este sistema social, económico y cultural, llamado democracia representativa, no permite que se pueda pensar, imaginar y construir una sociedad distinta, basada en relaciones de igualdad y de inclusión. Lo habitual ha sido reducir la participación política al engañoso acto de votar en elecciones poco frecuentes y a la debilitante representación estatal.
Muchas personas y organizaciones han querido promover cambios desde partidos políticos caracterizados por el clientelismo, o desde movimientos sociales estructurados jerárquicamente, de manera autoritaria. Sin embargo, todos han terminado reproduciendo la dinámica de la desigualdad y la exclusión social, la trampa de la representación, y la lógica de dominación.
Proponemos superar la ideología y las prácticas opresoras en que hemos sido criados, muchas veces inconscientemente. Queremos construir nuevos discursos y realizar acciones que contribuyan a desarrollar formas libertarias y solidarias de comunicación, conciencia y cambio social. Buscamos experimentar nuevos vínculos organizativos que faciliten a todos tomar decisiones autónomas de manera crítica y consensual. Proponemos, en consecuencia, una forma de organización social horizontal, empática, solidaria y antiautoritaria.
Los principios de libertad, igualdad, hermandad y respeto a lo humano y a la naturaleza son los ejes que nos permitirán construir una sociedad más justa y humana. Prestamos especial atención a las diversidades en los ámbitos ético, estético, sexual, cultural, ideológico, espiritual, entre otros. El espíritu propositivo, constructivo y transformador es quien nos nutre.
¿Qué queremos?
Hemos decidido llamarnos Vía Ácrata, con la intención de compartir un mensaje de coherencia entre medios y fines, entre teoría y práctica, entre pensamiento y acción. Quienes integramos este grupo no queremos imponer ni aceptamos imposiciones; aspiramos a una libertad y a un bienestar general cada vez mayor.
Nos apoyamos en la asociación voluntaria de personas y grupos de afinidad diversa, orientados hacia el bien común.
Queremos, sobretodo, formar parte de redes de organizaciones comunitarias y sociales creativas, de inspiración claramente ácratas, con vocación y tradición subversiva, difíciles de recuperar por el statu quo, que constituyan la materia prima destinada a desarrollar proyectos libertarios y transformadores.
Por principio, tomamos las decisiones por unanimidad o por acuerdo mutuo. No obstante, defendemos la expresión libre del pensamiento y la disensión. Cuando debemos tomar decisiones por mayoría, éstas sólo comprometen a las minorías cuando éstas dan su consentimiento expreso. Cuando no hay unanimidad, la minoría no está obligada a cumplir con la decisión, y siempre tiene derecho a que se haga mención de su desacuerdo. Los principios básicos que nos animan son las ideas de libertad, justicia social y ternura existencial.
Para cualquier contacto pueden escribirnos a via.acrata (en) gmail.com.

No hay comentarios:

Publicar un comentario